Es fácil que en invierno, con frío, viento y lluvia, nos quedemos encerrados en casa. La pereza toma asiento a nuestro lado en el sillón, pero Oh! sorpresa hay unos pequeños duendes que no van a permitir que la tranquilidad conquiste nuestro salón.
Os propongo una actividad fácil y que no requiere de grandes inversiones y esfuerzos para pasar un rato entreteniendo duendes.
Vamos a hacer cuadros con botones, de mil colores y cien tamaños.
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